Las pantallas LED, en su núcleo, son sistemas de visualización que utilizan diodos emisores de luz como fuente de luz principal, ofreciendo una mayor luminosidad, durabilidad y eficiencia energética en comparación con las tecnologías de visualización tradicionales. Compuestas de paneles LED modulares, estas pantallas pueden escalarse a diversos tamaños, desde unidades portátiles pequeñas hasta instalaciones masivas en estadios. Los parámetros técnicos clave incluyen el pitch de píxeles (que determina la resolución), la luminosidad (nits), la relación de contraste y el espacio de color (con soporte para hasta 16,7 millones de colores). Las pantallas LED indoor priorizan la claridad de pitch fino y la baja emisión de calor, mientras que las variantes outdoor cuentan con protección contra el clima robusta (calificaciones IP65+) y alta luminosidad (5000+ nits) para visibilidad bajo el sol. Las pantallas LED avanzadas incorporan funciones como HDR, tasas de refresco altas (1920Hz+) y sensores de brillo adaptativo, asegurando un rendimiento óptimo en diversas aplicaciones, desde publicidad hasta entretenimiento.